Con un alto nivel de creatividad y ejecución, la cocina de Lucho Martínez en Em ha conquistado al mercado local y fuereño. Utiliza productos de temporada de proveedores locales, lo que resulta en una cocina fresca y con mucha propuesta: una visión actual de la cocina mexicana con ciertos guiños hacia técnicas francesas y japonesas. Después de unos años ubicado donde solía estar el primer Máximo, actualmente es uno de los mejores bistrós del país: así lo reconoció la Guía Michelin con su primera estrella este año. Lo recomiendo para una cena en pareja o con amigos.